Por Alberto Sánchez

Viejas Fotuelas

Creo no equivocarme si digo que es compartido por muchos lectores el gusto de ver fotos antiguas de nuestra querida ciudad.

En dos ediciones de la Revista XXI, hace como cuatro años, publiqué en tres páginas una seguidilla de placas gráficas retratando la fisonomía urbana cuando despuntaba 1900. 

Como en aquellas ocasiones, ahora volví a husmear en el sitio Río Cuarto Antiguo, Memoria Colectiva y encontré algunas perlitas fotográficas que, claro está, las comparto con ustedes.

 El Cañón 

Hermosa postal fechada en 1915, enviada por Roberto Varizat. Muestra la esquina de Belgrano e Irigoyen o General Paz -me inclino por esta última- que distingue a la derecha el Mercado Central (actual Palacio Municipal) y a la izquierda, una vista parcial de El Cañón, emblemático almacén de la época.

Al respecto, María Antonieta Lloveras, sostuvo que, cuando niña, acompañaba a su mamá a hacer allí las compras. “Todavía recuerdo nítidamente el olor particular resultante de la mezcla de los aromas de distintos productos, sumado a las maderas del piso, estanterías y mostrador. Brillaban latas, frascos y botellas tentadoras por sus colores. Y también puedo ver las hábiles manos, dijo, que envolvían con papel gris la mercadería, haciéndole en los extremos una especie de orejitas para cerrarlos”. 

Por su parte, Marta Raquel Sánchez agregó que su abuela materna, Carmen Castro de Quiñones, fallecida en 1983, a los 97 años, solía contar que ese lugar donde se encuentra el Palacio Municipal “había sido un bosque, tupido y extenso donde se instalaban los indios”.

La foto lleva impresa una referencia: calle San Martín. Según me hacen saber, las arterias tenían una sola denominación en la totalidad de su recorrido. Fue años más tarde cuando Sobre Monte pasó a dividir con nombres diferentes a las cuadras que atravesaba; en este caso, San Martín-Belgrano.

 Farmacia del Pueblo

Esquina de Constitución y Colón. Entre otros establecimientos, estuvieron ahí la rotisería y restaurante La Cabaña y después, La Barraca.

Hay quienes afirman que el primer asentamiento de dicha farmacia estuvo enfrente, justamente donde hoy atiende. Y en los altos del actual Burger Fan, Kiti Deku explica que funcionó la escuela secundaria Mariquita Sánchez de Thompson, “sólo para señoritas” y de la cual fue alumna. “Cuando ingresabas al edificio, evoca, subías por unas escaleras de mármol y al final te recibía un gran hall que distribuye tres habitaciones: una era la dirección (la del balcón de la esquina) la otra, secretaría y una final como aula; seguía un pasillo que te llevaba a un pequeño patio de luz con un mini mástil y a lo largo del hall y el patio cantábamos el Himno todas las mañanas, excepto cuando llovía”. 

Añade que “también había dos aulas más, la cocina, biblioteca, un altillo que usábamos como laboratorio y un pequeño baño. Al final del pasillo bajábamos por otra escalera, que no era de la misma época sino más moderna, por la que accedíamos al entrepiso, (hoy, Teatrino de la Trapalanda) donde cursábamos Corte y Confección, con mesones grandes para poder diseñar los moldes en papel madera, aprender a hacer muñecas patas largas, maceteros en -hilo sisal, cerámica, etc. lugar que además usábamos como salón de actos”. 

De igual modo, recuerda que, en la cocina, “nos enseñaban recetas tradicionales y la materia, precisamente llamada Cocina y Repostería. Allí, en los recreos, atendía la cantina donde la portera nos vendía por la ventana que daba a un patio chiquito, las rasquetas y facturas”.

El Boulevard

La foto muestra que el sentido de circulación era al revés. Esta imagen corresponde aproximadamente a 1920. En primer plano, sobre la derecha, el Hotel España. 

Plaza General Roca

Foto de 1945 de la colección Varizat. Es dable observar que calle San Martín tenía el sentido de circulación inverso al actual. Al fondo puede verse el toldo blanco perteneciente a la tienda Gath & Chaves, a quien sucedió muchos años después Casa Norton. Contrasta la arquitectura chata de esta cuadra sobre Constitución, frente a plaza Roca.

Panadería Castelli

Situada en General Paz y Baigorria, la foto es gentileza de María Elena Marchesi. Al respecto, Euge Castelli, cuenta que es la tataranieta de José Castelli, fundador de la panadería. Y Oscar Roberto Tobares, vecino de la misma, manifiesta que el negocio se hallaba en la esquina de su casa, constaba de dos pisos y con gárgolas en los balcones de la planta alta.

Una esquina muy céntrica 

Años ´40, calle General Paz. Al fondo, Rivadavia con sentido de circulación automotriz al revés. El imponente edificio de la esquina, donde se asienta la Casa de la Cultura y antes lo hicieron un banco y Rentas de la provincia, se muestra con todo su esplendor. 

Edificio Valsecchi (LAS 5 ESQUINAS) 

Como acotación a lo que puede leerse impreso en la fotografía –cedida por Daniela Santa- vale la pena recordar que en los altos del señorial inmueble mencionado dictaba cursos de distintos oficios la Academia Bonelli. En la planta baja operó durante décadas la ferretería más importante de la ciudad: Valsecchi.

Tras la disolución empresaria, ocuparon el amplísimo salón, entre otros, una tienda de ropa y ahora una religión cristiana que lo usa como templo. 

Acto Patrio

Según la escritora local Yamila Alvarez, la foto –elegida por la autora para ilustrar la tapa de un libro de su autoría en 2002- corresponde a un desfile patrio de 1931, con alumnas presentes de la Escuela Normal llevando en sus manos ramilletes de flores. La fotografía original pertenece a Blanca Obregón de Cabral, quien la donó al archivo histórico del citado colegio.

Casi con seguridad puede decirse que el baile de las cintas que se ve tuvo lugar frente a la Iglesia Catedral. Se destaca el cartel de la Mueblería Gran Bazar; al lado, el inmueble donde desplegaría su actividad comercial la emblemática Tienda Sol de Mayo (o de las turcas) y en la esquina (actual Banco de Córdoba) funcionaba otra tienda afamada: Los Vascos. 

Constitución al 900 

Registrada en 1960, llama la atención la antigüedad de los inmuebles de la vereda izquierda, donde la propiedad que más nítidamente sobresale era de la familia Kowalk. Lamentablemente, todas estas casas fueron demolidas.

Sobre la margen derecha aparece el cartel de la legendaria Tintorería Japonesa de los Asato –hoy sala municipal de muestras pictóricas y otras obras artísticas- y al fondo, irrumpe imponente el esqueleto del futuro edificio del Centro Comercial. Entre los automóviles estacionados hay un DKW Auto Unión, muy popular en la década del 60.