Feria del libro Juan Filloy 2024
“Siempre que publico un libro mi intención es dejar mensajes que enriquezcan nuestro espíritu”

Susana Biset presentó su libro ‘El silencio de los limoneros. Una violencia incesante disfrazada de familia’. Con una trama cruda y explícita, la autora explica que esta historia se alza como un llamado a no callar, a encontrar la valentía de reescribir nuestros propios destinos

El miércoles 11 de octubre, en el marco de la Feria del Libro Juan Filloy, Susana Biset (71) presentó ‘El silencio de los limoneros. Una violencia incesante disfrazada de familia’, un libro que invita a reflexionar sobre los múltiples rostros de la violencia con una trama cruda y explícita. “Es una novela situada en 1900 en una finca cuyana donde las pasiones y conflictos familiares hacen eco incesante en cada rincón. Escribir este libro fue un desafío porque nunca había narrado una historia en esa zona. Tuve que estudiar bastante para representar de manera fidedigna varios temas que no había tratado antes: de qué manera se extrae el mármol, cómo es el cultivo de limones y la producción de vino”, dijo Biset.

La autora, de raíces irlandesas, francesas e italianas, ha desarrollado un profundo amor por las culturas debido a su curiosidad e imaginación. Su pasión por la escritura se originó como extensión de costumbres familiares ya que su abuela irlandesa y su padre contaban cuentos. “Desde que era pequeña mi papá me decía que iba a ser escritora”, recordó.

Actualmente lleva publicados más de treinta libros, entre ellos, Por amor a Cristina (2007), Y los dioses atropellaron (2014), la saga Tierra india (2015, 2016, 2018), Donde nace el sol (2023).

– ¿Qué crees que van a experimentar o sentir los lectores ante este relato? ¿Te planteaste algún objetivo con este libro?

– Es una muy buena pregunta. Siempre que publico un libro mi intención es dejar mensajes que enriquezcan nuestro espíritu. Creo que en ‘El silencio de los limoneros’ mis personajes hablan sobre lo maravilloso que es practicar la resiliencia y cómo encontramos tesoros afectivos donde jamás imaginamos. Esta historia se alza como un llamado a no callar, a no dejar que el abuso defina nuestras vidas y, también, a encontrar la valentía de reescribir nuestros propios destinos.

Para cerrar considero que sería interesante hablar sobre los matices tan extremos que existen en el libro donde las acciones descarnadas contrastan notablemente con la maravillosa ternura, la furia y los anhelos de venganza, con el desinteresado cariño, el sojuzgamiento, con la más absoluta libertad de acción, y la sabiduría calculadora con las valiosas enseñanzas que nos brinda el contacto con la vida silvestre. ¡Muchas gracias!