Nota de Tapa
“Hacer el Camino de Santiago fue una experiencia muy fuerte, se sienten muchas cosas en medio de la naturaleza donde lo urgente queda en casa. Ese fue el desencadenante de este libro”

Viviana Rivero presentó en Río Cuarto ‘Los soles de Santiago’. En la nota, la autora destaca que la inspiración no depende del lugar, sino del deseo de contar historias. Con este último libro busca transmitir mensajes que inviten a la reflexión sobre el futuro de la humanidad

Viviana Rivero (58) visitó Río Cuarto para presentar su último libro ‘Los soles de Santiago’ que encuentra su desencadenante en las vivencias experimentadas por la escritora durante su trayecto por el Camino de Santiago. “Dije, yo quiero contar sobre esto. Elegí entonces escribir sobre dos mujeres, en distintas épocas, transitando el mismo recorrido que hice. Fue una experiencia muy fuerte, se sienten muchas cosas en medio de la naturaleza donde lo urgente queda en casa. Esta travesía fue un desencadenante, pero tanto el argumento como los personajes fueron apareciendo en mi cabeza y, a medida que fui escribiendo, se terminaron de completar”, compartió Rivero.

– ¿Cuándo comenzaste a dar tus primeros pasos en la escritura? ¿Hay algún momento o experiencia de tu vida que influyera en esta decisión?

– Comencé a dar mis primeros pasos en la literatura cuando mis hijos empezaron la escuela primaria. Hasta ese momento trabajaba de abogada. Noté que tenía unas horitas libres para mí y no las quise agregar a mi estudio jurídico, sino que empecé a escribir mi primera novela ‘Secreto bien guardado’ que tiene su propia serie protagonizada por Oriana Sabatini y Victorio D’Alessandro. Soy una convencida de que las vocaciones nos persiguen, las traemos grabadas en el ADN y, en un momento, nos atrapan.

– ¿Podrías describir o definir tu estilo de escritura?

– Mi estilo es muy amplio porque mis novelas son novela histórica, pero muchas veces también tienen thriller, romance, por momentos se torna un libro con un mensaje, con cierta autoayuda. Muchas veces me han dicho que no es fácil definir mi estilo.

– ¿Hay algún lugar en particular que consideres fundamental para tu inspiración?

– Verdaderamente creo que la inspiración no depende del lugar, sino del fuerte deseo de escribir, de la necesidad. A veces escribo en un lugar con una vista preciosa, con las montañas de fondo, o, cuando estoy en España, en un departamento muy pequeñito que no tiene ninguna vista. No me doy cuenta cuál es mi exterior, porque me concentro totalmente en la historia que quiero contar. No importa el lugar, sino el deseo, la pulsión que se siente.

Sí podría contarles que tengo algunas costumbres a la hora de escribir, por ejemplo, casi siempre lo hago descalza. Además, me gusta tomar té y como no puedo estar parándome a cada rato para prepararlo, lo que hago es hacer termos enteros de té, me los llevo y tomo mientras escribo.

– Al tratarse de novela histórica, sabemos que realizas una extensa investigación para tus libros. ¿En qué etapa del proceso creativo comenzás a investigar y cuánto tiempo le dedicas a esta tarea?

– La investigación de lo histórico, político, social, de las costumbres diarias, de lo cotidiano, lo hago en la primera etapa. Después viene todo lo demás. Esta parte me lleva varios meses de estudio, de leer diferentes libros que tengan que ver con la época de lo que voy a escribir. El libro Los soles de Santiago me llevó un año escribirlo.

– ¿Qué mensaje esperas que los lectores se lleven al finalizar ‘Los soles de Santiago’?

– El mensaje que tiene el libro es que el camino que estamos siguiendo como seres humanos nos está llevando hacia lo que yo muestro como futuro. Con el tiempo se va a ver bien eso de tener un chip dentro, de conectar la tecnología con el ser humano de tal modo que podamos perder la humanidad que todavía tenemos. Es para repensar. Si bien muestra lo que se viene, y esto da un poquito de miedo, al mismo tiempo proporciona la salida, de cuál es la solución. Es como un semáforo que está titilando en amarillo y nos dice: ¡cuidado ser humano, vas hacia esto!

– ¿Cómo fue la presentación del libro en nuestra ciudad y la interacción con el público?

– A lo largo de los 15 años he estado varias veces en Río Cuarto, en diferentes eventos, librerías. Siempre es un gusto volver a esta ciudad, donde tengo mis lectores que me escriben en las redes, algunos que me siguen desde hace tiempo e incluso, algunos que, con los años, nos hemos hecho amigos. La interacción siempre la disfruto, preguntan mucho, son muy cariñosos, muy lectores, es un público culto.

– Desde tu perspectiva, ¿qué papel crees que juega la literatura en la sociedad actual?

– La literatura en la sociedad actual cumple el papel de mostrarnos y hacernos pensar las cosas que suceden en el mundo. No escribimos de lo que debe ser, sino que simplemente escribimos historias que pasan, que tal vez no es lo que tenía que ser.

Creo que el escritor es un gran observador de la realidad, capturando tanto la macrorealidad, el mundo, como la microrealidad, que es su entorno inmediato: su casa, vecino, familia. Observa, va hacia el papel y lo plasma. A diferencia de otras personas que rápidamente se olvidan de lo que observaron, el escritor al plasmarlo brinda la posibilidad de meditar sobre lo que está contando ya sea cosas que suceden, están por suceder o que han sucedido, cosas que atañen al ser humano.

 

 

Sinopsis de ‘Los soles de Santiago’

Dos mujeres valientes entrelazan dos momentos históricos, el año 31 a.C. y el año 2055. En esos tiempos tan distantes entre sí, ambas transitan por una misma geografía, que hoy se conoce como el Camino de Santiago, en España.

Es el futuro y las autoridades globales controlan las vidas de las personas. Como parte de un plan sistemático, ya no se ven adultos mayores en las calles: desaparecieron tras las últimas pandemias que azotaron el planeta. Eme perdió a sus padres y está sola, agobiada y sin trabajo. Todo cambia cuando se cruza con Hache, miembro de una organización rebelde que planea un sabotaje en Santiago de Compostela. A fin de infiltrarse sin levantar sospechas, Eme asume la identidad de una peregrina.

Mientras avanza por las rutas ancestrales, se ve inmersa en un mundo nuevo, que la conecta con la naturaleza y la espiritualidad. Allí conoce a Orión, con quien vivirá un gran amor, y se adentra en una antiquísima historia vinculada con Las Médulas, mítica mina de oro del Imperio romano, y con Cazue, una mujer perteneciente a la tribu de los astures que libró una dura batalla para recuperar a su hijo robado.

Viviana Rivero vuelve con una novela adictiva y vibrante, que se aventura a la vez en el futuro y en el pasado. Más allá de su cautivadora trama, Los soles de Santiago plantea cuestiones fundamentales acerca del destino peligroso que se cierne sobre el ser humano cuando violenta la armonía del universo.