Entrevista
“La historia de Clarisa Duarte no solo me conmovió, me atravesó, y sentí que lo mínimo que podía hacer era escribir un libro que honrara ese legado”
Pensado para las infancias, el libro ‘El Secreto de las Estrellas’ fue declarado de Interés Legislativo, Cultural y Social. Desde la ternura, Romina Bada propone una forma distinta de sembrar memoria: con palabras que abracen e iluminen

Romina Soledad Bada (42), poeta, escritora e historiadora, publicó ‘El Secreto de las Estrellas’, un libro que surge de su compromiso con la memoria y la búsqueda por sembrarla desde la literatura. Mientras comenzaba a escribir su tesis doctoral, bajo la guía del Dr. Adrián Carbonetti y la Dra. Viviana Macchiarola, centrada en el pasado reciente argentino, se encontró con que había escasas producciones que abordaran la última dictadura cívico-militar desde una mirada local, regional y, sobre todo, pensadas para las infancias. “De manera casi natural, sentí el deseo de transformar esa falta en una oportunidad”, expresa Romina.
El libro, recientemente declarado de Interés Legislativo, Cultural y Social por el Concejo Deliberante, cuenta la historia de Clarisa Duarte, hija de José Alfredo ‘Peco’ Duarte, trabajador no docente de la Universidad Nacional de Río Cuarto, detenido-desaparecido por el terrorismo de Estado.
“Conozco a Clarisa desde hace años y siempre me conmovió su vida: su incansable lucha por la memoria, la verdad y la justicia; su manera de recordar y honrar a su padre, y también el coraje y la dignidad con los que su madre, Susana Miranda, atravesó el dolor del exilio interno, el ‘inxilio’. Esa historia no solo me conmovió: me atravesó. Y sentí que, como ciudadana, como escritora, como mujer, lo mínimo que podía hacer era escribir un libro que honrara ese legado. Que hiciera brillar esa estrella que tantos años estuvo oculta en la memoria colectiva de nuestra ciudad”, detalla la escritora.
– ¿Por qué decidiste dirigirlo a un público infantil?
– Elegí dirigirme a un público infantil porque me emociona profundamente pensar en la Clarisa niña. En esa niña que creció con ausencias, con silencios, con preguntas sin respuestas. En esa niña que, a pesar de todo, construyó una vida luminosa. Esa resiliencia silenciosa y poderosa me conmovió. Y pensé que, si lograba transmitir, aunque fuera una parte de eso, a través de un cuento, entonces estaría haciendo un pequeño aporte a la memoria, pero también a la ternura, a la verdad y al amor.
El libro está escrito con una sensibilidad profunda, con un lenguaje cuidado y respetuoso, con una estética visual que potencia su belleza y con una afectividad que brota en cada página. Porque los niños y las niñas también tienen derecho a conocer la verdad. Pero tienen derecho a conocerla con palabras que abracen, que reparen, que iluminen. “El Secreto de las Estrellas” es mi forma de abrazar a esa infancia, y también a todas las infancias que vendrán.
– Si pudieras describir el libro en tres palabras ¿Cuáles serían?
– Tierno, comprometido y luminoso. Tierno, porque está escrito desde la sensibilidad y el cuidado hacia las infancias. Comprometido, porque abraza la memoria, la verdad y la justicia como pilares fundamentales. Luminoso, porque, a pesar del dolor que habita en su origen, es un libro que ofrece esperanza, amor y dignidad.
– ¿Cómo fue el trabajo junto a Carolina Klein?
– Trabajar con Caro fue una experiencia profundamente enriquecedora y muy armoniosa. Desde el primer momento, se mostró abierta, generosa y profesional. Tiene una sensibilidad especial y una gran capacidad para captar lo que uno quiere transmitir, incluso más allá de las palabras.
A medida que Caro fue compartiendo sus propuestas, con su mirada aguda, sensible y poética, me fui dejando llevar. Ella propuso trabajar con ilustración digital, explorando una paleta cromática en tonos azulados, que terminó por darle al libro una atmósfera emocional muy especial. Ese azul —que evoca la noche, los sueños, la profundidad del recuerdo— terminó siendo un lenguaje visual en sí mismo, que potenció el relato y le dio una identidad única. Confiar en el talento de Caro fue una de las mejores decisiones del proyecto. Su aporte no solo embelleció el libro: lo completó, lo expandió, lo hizo brillar.
– ¿Qué mensaje te gustaría transmitir a través de esta obra?
– A través de El Secreto de las Estrellas, me gustaría sembrar un mensaje profundo y necesario: que las memorias también pueden contarse desde el amor, la ternura y la esperanza. Que las infancias tienen derecho a conocer nuestra historia, no desde el miedo, sino desde la empatía. Que la verdad no tiene edad, pero sí necesita ser contada con palabras que abracen.
Quiero que este libro invite a mirar nuestro pasado reciente con ojos sensibles, que nos permita hablar de lo que duele, sin dejar de lado lo que repara. Que las niñas y los niños puedan leer esta historia y reconocer que, incluso en los momentos más oscuros, hubo personas que resistieron, que amaron, que soñaron con un país más justo. Y que esos sueños siguen vivos, en cada gesto de memoria, en cada búsqueda de verdad, en cada acto de justicia o en cada estrella en el cielo.
Mi mayor deseo es que esta obra acompañe, despierte preguntas, genere diálogos, abra puertas. Y que sea un pequeño faro para quienes creen que educar también es recordar. Porque recordar es un acto de amor. Y este libro, en el fondo, es eso: un acto de amor hecho cuento.