La “comedia” siempre es bienvenida para nosotros, con la aclaración de que no en todas las ocasiones podemos acceder a propuestas de este género con resultados mínimamente satisfactorios. Cuando nos referimos a “comedia”, estas pueden ser, generalmente, humorística, romántica, dramática, de enredos, costumbrista o melodramática. En el caso que nos ocupa, “Al borde del abismo” sería una comedia de humor, romántica, turística y, por momentos, hasta cómica. Su protagonista, una exestrella de rock norteamericana que no logra superar el fracaso en su intento de volver al ruedo artístico, decide recluirse en una casa de singular ubicación: al borde de un acantilado y con el bello mar de la isla de Chipre como horizonte.

Se llevará una sorpresa cuando descubra que el sitio recibe visitantes frecuentes que no lo hacen, precisamente, para disfrutar del paisaje y tomar el sol. Circulará en la trama, elemental pero efectiva, algún antiguo amor, enredos familiares, reproches varios y promesas incumplidas. Todo ello con el atractivo marco de Chipre, cuidadosamente fotografiado. Personajes queribles, empáticos, un elenco de secundarios acorde a las circunstancias de la historia y un protagónico de Harry Connick Jr. adorable, conectado absolutamente con su personaje. “Al borde del abismo” seguramente no quedará registrado como un gran film, aunque usted sí tiene la oportunidad de pasar un agradable momento mirándolo. Anímese.

Elpidio Blas