Entrevista
Una emocionante travesía circense
Marcos “Cuca” Luján y Griselda Flotron han recorrido un emocionante camino, llevando su arte a diversas provincias y ciudades, haciendo reír y emocionar a grandes y chicos por igual. En esta entrevista conocemos más sobre Circo en Acción
En el año 2002, en el club Acción Juvenil, comenzó a gestarse Circo en Acción. Esta emocionante travesía inició cuando Marcos «Cuca» Luján, quien previamente había estado trabajando con la compañía Circo Amarillo, tomó la decisión de separarse. Fue en este contexto que surgió la oportunidad de dar clases de circo en el club. Marcos no dudó en aceptar el desafío, y así comenzó el proceso de creación de lo que eventualmente se convertiría en Circo en Acción. Con el tiempo, se unió al elenco Griselda Flotron, sumando su talento y creatividad al proyecto.
Desde entonces, Circo en Acción ha recorrido un camino lleno de emociones, llevando su espectáculo a diversas partes de América del Sur como Brasil, Chile y su país natal, Argentina. Han visitado numerosas provincias, como San Luis, La Pampa, Buenos Aires, Santa Fe, Mendoza y Río Negro, además de recorrer varias ciudades de la provincia de Córdoba, donde cada presentación es una oportunidad para cautivar al público con su destreza, creatividad y pasión por el arte circense.
– ¿Cuánto tiempo llevan practicando circo?
Marcos: hace 26 años que me dedico al circo, empecé por allá en el año 96. Primero como un hobby y, con el pasar del tiempo, terminó siendo un trabajo. Quizás mi primer encuentro fue en el colegio, cuando un compañero de primaria me enseñó a hacer malabares. También recuerdo que mi hermano Marcelo un día cayó y me dijo ‘che, yo sé hacer malabares’ a lo que respondí ‘yo también’; saber que ellos estaban aprendiendo me motivó más. Así me fui encontrando con esto.
Griselda: en mi caso, hace 14 años, comencé a trabajar técnicas aéreas, que son parte del circo. Desde chica me encantó la acrobacia, pero llegó un momento de mi vida que no pude hacer más y me quedó como materia pendiente. En cuanto tuve la oportunidad hice un primer acercamiento a la acrobacia en tela y eso me fue llevando a otras ramas del circo.
– ¿Cómo arman cada una de sus funciones? ¿Qué detalles tienen en cuenta?
Griselda: Las funciones son parte de todo un proceso. Una vez que, durante un tiempo, se desarrolla la misma en diferentes pueblos, llega un momento que te dan ganas de crear algo nuevo. Empieza a surgir una idea, muy lentamente, se va poniendo nombre, se comienzan a desarrollar los números. A lo mejor en ese proceso desde que dijimos ‘vamos a hacer un nuevo show’ hasta que se termina, pasa un año. Es algo lento, que va naciendo de a poquito.
Marcos: principalmente lo que tenemos en cuenta para hacer las funciones es que sean entretenidas, que hagan reír, no sólo al niño sino a toda la familia, siempre tratamos que sean para todo público.
– ¿Cuál es su acto favorito?
Griselda: nos gustan varios actos. Nos divertimos bastante en los números participativos porque son un juego de complicidad entre el público, los personajes y la persona que está en medio de la escena siendo la protagonista. Números muy bonitos son los de acrobacias que también atraen bastante y los números de magia, la pasamos muy bien en ellos.
– ¿Cuál es el momento más divertido o cómico que han vivido durante una función?
Marcos: siempre nos pasan cosas graciosas en las funciones. Creo que nos reímos bastante no solamente en los espectáculos sino también en los viajes. Más vale que por ahí tenemos discusiones como cualquier elenco, como cualquier pareja, pero la verdad siempre la pasamos bien y nos reímos. Ese momento que nos olvidamos parte de la secuencia de lo que viene y nos decimos cosas entre nosotros sin que el público escuche, eso nos causa un poco de risa.
– ¿Qué es lo que más disfrutan de ser artistas de circo y qué esperan lograr en el futuro?
Marcos: me parece que lo que más disfruto de ser artista de circo es el hecho de ver a la gente sonreír, tanto en el circo como en el stand up -también me dedico a eso-, me parece que es súper lindo sacar sonrisas, verlas, sentir la energía que transmiten. En cuanto al futuro, seguir con lo que hacemos, entretener el público, pasarla bien, seguir viviendo de esto, me parece que es una de las cosas fundamentales que espero para mi futuro.
Griselda: por mi parte, lo que más disfruto es la complicidad con los artistas que trabajan con vos; de un lado está el público, del otro tus cómplices y tenés que ir resolviendo todo muy espontáneamente, inclusive si hay fallas, por ejemplo, hubo veces que nos olvidamos el vestuario estando en otro pueblo y tenés que ver cómo resolverlo; el público quizás ni se entera de toda esa complicidad que hay en el detrás de escena y en la escena misma cuando algo no sale como debía. Ese tema de resolver todo en el momento, en vivo, es muy lindo, es una experiencia diferente. Además, se disfrutan muchísimo los aplausos, la risa de la gente, todo esto retroalimenta el trabajo que uno hizo, los nervios que se pasan, los apuros, las corridas.
También es muy lindo que cada show nuevo nos exige aprendizajes, uno no se puede quedar en lo que sabe sino tratar de ir investigando nuevas disciplinas, aunque sean cositas simples pero vistosas para despertar la atención del público, tener algo nuevo que mostrar, generar curiosidad, así que también hay que buscarle la beta interesante para que la gente después quiera ver ese producto que nosotros creamos con tanto trabajo.
Sobre el futuro decir que vivimos mucho el día a día y trabajamos mucho sobre las funciones que se estrenan. Se va estrenando un show y el producto no queda así, sino que se sigue trabajando durante un año más o menos hasta que logre tener una forma donde nos sentimos cómodos con el público, con cada número.
Ahora justamente estamos trabajando en un nuevo show que recién está comenzando a nacer. Así que esperamos que sea un lindo trabajo, que se haga en el tiempo que pensamos y que sea un producto que nos agrade, que nos dé felicidad.