Entrevista
“Siento mucha responsabilidad en lograr que el momento de entrada de la novia sea perfecto. Cuando veo la emoción en sus caras me lleno de alegría”
María Paula Oga comenzó su camino en la música a los tres años, impulsada por sus padres. Hoy lidera Cherry Soul, banda especializada en música para eventos, y está trabajando con algunos amigos en un proyecto para tocar en cruceros

La primera presentación de María Paula Oga (32) como cantante en una boda fue en el año 2019, sin embargo, su conexión con la música comenzó mucho antes, desde que tenía solo tres años, ya que sus padres la inscribieron, junto a sus hermanos, en talleres de iniciación musical basados en el método Suzuki e instrumentos, empezando por el piano.
“En casa tuvimos mucha influencia musical, si bien mis padres no son músicos, mi papá, Alejandro, es un melómano aficionado y nos hizo escuchar siempre mucha variedad de estilos. Me la pasaba viendo videoclips y escuchando CD’s ya que teníamos varios muebles repletos de discos. Desde muy chica quería cantar, trataba de imitar a las cantantes que me gustaban. Hoy, me emociona mucho interpretar las canciones en la Iglesia porque es un momento único”, expresó la cantante.
Actualmente, junto a Fernando Ingentron llevan su música a diferentes eventos con ‘Cherry Soul’.
– ¿Existe algún músico o conjunto que haya dejado una marca significativa en tu enfoque musical? ¿Cuál consideras que es tu estilo?
– Un montón. Es difícil elegir, pero sí te puedo decir que como cantante mi máximo ídolo es Celine Dion. En cuanto a mi estilo musical creo que es una mezcla entre Soul y Blues; también me gusta mucho el Pop.
– ¿Cómo fue esa primera experiencia, en el 2019, cantando en una boda? ¿Qué significado tuvo para vos?
– La primera vez que canté en una boda fue por invitación de un colega; una empresa de música de Córdoba necesitaba una cantante de reemplazo porque tuvieron un inconveniente de último momento. Miré el repertorio, conocía todos los temas, así que armé mis letras y fui. Hasta ese día desconocía bastante cómo era el ambiente musical en los casamientos. Pero la experiencia me encantó, en la Iglesia todo fue muy emotivo y después en la recepción me divertí muchísimo.
– ¿Qué es lo que más disfrutar de cantar en bodas?
– Verdaderamente disfruto mucho que los novios me elijan para acompañarlos en este día tan importante, pero cuando la novia está por entrar soy una bola de nervios porque siento mucha responsabilidad en lograr que ese momento sea perfecto. Cuando veo la emoción en sus caras me lleno de alegría.
– ¿Cómo seleccionan el repertorio para estos eventos? ¿Trabajan con pedidos especiales de los novios?
– Para armar el repertorio nos guiamos de varias cosas. Desde las peticiones de los novios, las recomendaciones de gente allegada al ambiente, hasta sugerencias de los invitados a la fiesta. Por supuesto también influye mucho las preferencias musicales que tenemos con Fer, muy a tono con lo que hacemos. Siempre tratamos de elegir temas conocidos, que transmitan alegría o que simplemente generen algo positivo en los presentes.
Asimismo, le damos la posibilidad a los novios de elegir tres temas fuera de nuestro repertorio, que, generalmente, son para la ceremonia religiosa y el civil. En ocasiones también para la fiesta, si quieren musicalizar una entrada especial o algún momento particular del evento.
– ¿Hay alguna canción en particular que te guste más interpretar?
– Eso va variando, a veces me copo con alguna o algunas. Después me canso y paso a otra cosa. Pero si disfruto más cantar lo que queda mejor con mi voz.
– ¿Cómo es tu presente en la música? ¿Tenés alguna meta u objetivo que te gustaría alcanzar?
– Actualmente estoy con mi proyecto Cherry Soul, ofreciendo música de recepción para eventos en general. Pero también tenemos un proyecto en común con amigos que se llama Spicy Groove, que nace con el objetivo de lograr aplicar para tocar en cruceros. Queremos irnos a tocar y viajar por el mundo, ojalá se nos dé.
